El concepto de memoria operativa ha ido evolucionando desde un simple almacenamiento temporal a corto plazo hasta una memoria de trabajo con un papel central en los modelos de funcionamiento cognitivo. Una definición sencilla de la capacidad de memoria operativa sería el número de ítems que pueden ser recordados durante una tarea compleja de memoria operativa, que tiene dos partes: el mantenimiento de la información activa para poder ser recordada y un componente de manipulación de información. Se ha visto que las personas con mayor capacidad de memoria operativa tendrían un perfil más racional y estaría relacionada con la capacidad de excluir pensamientos intrusivos y con la evasión de la mente.
Podéis consultar el artículo que he escrito sobre este tema en: Artículo Memoria operativa
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