Este trabajo propone una revisión de estudios en los que se apoya para decir que el tratamiento con MDMA podría resultar útil en individuos adultos con autismo para tratar la ansiedad social. El artículo no saldrá en la revista en papel Progress in Neuro-Psychopharmacology and Biological Psychiatry hasta el número de enero, aunque ya está disponible on-line.
El MDMA (3,4-metilendioximetanfetamina) es lo que se conoce popularmente como éxtasis o Molly. Es un potente liberador de serotonina, así que como inhibidor de dopamina y noradrenalina. También produce un aumento de los niveles de cortisol, prolactina, adrenocorticotropina y oxitocina. El uso farmacológico de esta sustancia ha venido empañado por el uso recreativo. En cuanto al éxtasis obtenido en la calle, está cortado con otras sustancias, no se trata sólo de MDMA y, por otro lado, las personas que toman éxtasis de modo recreativo suelen ser policonsumidoras, es decir, que también utilizan otras sustancias. También se comenta en esta revisión que las dosis de MDMA que se utilizan en animales en los estudios están muy por encima de las dosis equivalentes en humanos. EL MDMA no está considerado como físicamente adictivo, pero sí hay estudios que hablan de efectos psicológicos a corto y largo plazo en individuos vulnerables, aunque estos estudios están realizados en el ámbito de policonsumidores.
En estudios realizados en individuos sanos a los que se les administraba MDMA, se observó que se producía una disminución de la actividad en la amígdala izquierda, lo que disminuía la reactividad emocional hacia rostros enojados. En otros estudios, se vio que daba a los individuos la capacidad de hablar honesta y abiertamente de sus relaciones, sin que interviniese una actitud defensiva. En contextos informales, el MDMA ha resultado útil en el tratamiento de estrés postraumático, fobias, depresión, etc. Hay, además, datos de experiencias personales con el MDMA de individuos diagnosticados de autismo. Estos individuos reportan desde mejoras globales de funcionamiento hasta alivio de síntomas de ansiedad o trauma.
Por supuesto, hay que desarrollar modelos y métodos clínicos seguros, pero estos autores defienden que hay pruebas suficientes como para realizar una prueba piloto.
Danforth, A.L. et al. (2016) MDMA-assisted therapy: A new treatment model for social anxiety in autistic adults. Progress in Neuro-Psychopharmacology and Biological Psychiatry, 64(4), 237-249.
No hay comentarios:
Publicar un comentario